Entendemos como energías renovables a toda aquella energía que es obtenida de una fuente natural y, virtualmente, inagotable. Estas fuentes se consideran inagotables por la gran cantidad de energía que poseen y porque se generan sin esfuerzo por parte de las personas; ejemplo de ello es el sol. Son también denominadas energías alternativas, ya que su llegada coincide con la substitución de fuentes de energía; especialmente los combustibles fósiles.
Todo ello se vincula con la crisis energética, el momento en el que la demanda es tan grande que no se puede abastecer; la reserva de fuentes de energía actuales son finitas y pueden también encarecerse sistemáticamente. Es por ello que las renovables son consideradas una alternativa a los combustibles fósiles, ya que pueden generar electricidad explotando fuentes de energía que son totalmente naturales; sin que pueda existir ese límite de recursos ni ese aumento del coste de la energía.