Para destacar y atraer la mirada de las personas que nos pueden ayudar a obtener más y mejores oportunidades, es necesario dar el salto del buen empleado al empleado destacado, que se caracteriza por ser competitivo y capaz de añadir un valor a la organización.
En toda empresa existen empleados que cumplen con sus objetivos, son proactivos, trabajan duro y se comprometen con su empresa, sin embargo, es común ver cómo una persona eficiente puede pasar años realizando la misma actividad sin avanzar en su carrera. Trabajar duro y hacer las cosas bien es sólo la mitad de la tarea cuando el reto es impulsar nuestra carrera.
Desde que nos integramos al mercado laboral entendemos que existe oferta, demanda y competencia. Nosotros vendemos fuerza de trabajo, talento y conocimientos y las empresas contratan capital humano que les permita funcionar.
Como empleados o profesionistas es importante que nos visualicemos como un producto atractivo: un empleado eficiente que brindará beneficios a la empresa. Para que las empresas estén dispuestas a pagar más por nuestro trabajo es necesario diferenciarnos, es decir, ofrecer ‘algo’ adicional en comparación con nuestra competencia.
¿Cómo ser un buen empleado?
Inteligencia Emocional
La inteligencia emocional es una de las soft skills más importantes para el trabajador moderno. Desde saber cómo afectan tus emociones a tu jornada laboral, hasta el cómo afrontar situaciones de estrés o decisiones de alta carga emocional. Este aspecto podría incluso ser el núcleo del que parten el resto de habilidades blandas o soft skills. Si tienes un buen nivel de inteligencia emocional, puedes aplicarlo a las demás aptitudes que nombramos en este artículo.
Capacidad para resolver problemas
Esta habilidad describe la receptividad de las personas. El cómo y por qué las personas responden de cierta forma a los problemas o crisis espontáneas siempre tiene un por qué ligado a sus experiencias, crianza y a la inteligencia emocional. Una persona que es capaz de solucionar conflictos de forma acertada, tiene un manejo y control superior de sus emociones frente a momentos de estrés que suelen ser detonantes.
Flexible
Hoy en día, y ano hay puesto de trabajo donde se empiece con unas funciones y 20 años después el trabajador continúe con las mismas. Esos puestos de trabajo ya no existen. Los cambios en las empresas son cada vez más rápidos y los trabajadores del futuro deben ser capaces de adaptarse.
Control del estrés
Cada vez es más habitual trabajar con una dosis de estrés diario. Siempre recomendamos disminuir esos niveles al mínimo, ningún trabajo merece la pena que nos dejemos la vida. Pero si es verdad que siempre habrán picos de estrés en el trabajo, y un buen trabajador deberá ser capaz de gestionar esos picos de trabajo fuera de normal.
Consejos para que te contraten fácilmente
No hay duda que el currículum es fundamental al seleccionar a un empleado, pero eso no significa que el currículum sea lo único que importe. Al contratar a un trabajador debes mirar más allá de su currículum, y prestar atención a otros aspectos como su personalidad, cualidades o disponibilidad. Es importante que además de estar cualificado para el puesto que quieres cubir en tu empresa, se trate de un posible trabajador con el que hayas empatizado y que creas que se va a adaptar a la filosofía de tu empresa.
Si te interesa conocer más sobre esto, te recomendamos revisar El curso en Gestión Laboral que tenemos aquí en CEUPE, el cual ayudará al estudiante en la consecución de las habilidades para promover un ambiente adecuado y positivo en la empresa mediante el establecimiento de buenas relaciones entre el personal.
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