Trabajar de más sin el descanso adecuado puede llevarte al límite del temido burnout. Y una vez llegado a ese punto, los resultados y el nivel de productividad suelen caer en picada.
Aunque nuestra cultura diaria nos lo dicte y nos lo haga creer así, estar siempre ocupado no significa ser siempre productivo. Después de varias tareas es necesario que la mente y el cuerpo descansen, y eso no te convierte en una persona perezosa o que descuide sus responsabilidades.
A continuación te decimos algunos consejos para aumentar tu productividad.
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Tips para mejorar la productividad en el trabajo
Descansa
Los descansos durante la jornada laboral permiten mantener la concentración a largo plazo y relajarse. Un breve tiempo de inactividad profesional le permite al cerebro renovar su creatividad y lidiar con las distracciones fuera del trabajo.
Las pausas activas son un valioso recurso que permite a los colaboradores cambiar de actividad y ejercitarse para recargar su energía y volver a sus tareas renovados, de esta manera se mejora la productividad y se cumplen las tareas a tiempo.
Organiza tus tiempos
La organización y disciplina son claves para mejorar la productividad. Desde mantener al día el calendario de reuniones, pasando por actualizar la lista de tareas y proyectos, hasta organizar las carpetas en el archivador físico y los documentos digitales, cada parte de las funciones de un colaborador debe estar en orden para optimizar los procesos.
El desorden hace que perdamos tiempo mientras buscamos objetos y archivos perdidos. Es muy difícil completar las tareas pendientes cuando un colaborador no sabe dónde se encuentran las herramientas necesarias para lograrlo.
Propón tiempos de entrega
Los plazos permiten a las personas saber cuándo necesitan entregar sus tareas, además de motivarlos a trabajar más rápido y completar sus objetivos a tiempo. Nada daña más la confianza y reputación que incumplir un plazo sin justificación.
Los plazos vencidos demuestran falta de profesionalismo y de organización. Por ello, definir fechas límite para cada tarea y proyecto, además de hacer un seguimiento riguroso, es vital para optimizar la productividad de los equipos.
Duerme bien
Estar en casa durante tanto tiempo afectó la forma en la que percibimos el descanso. A medida en que el trabajo se combinó con nuestra vida personal, la línea entre el trabajo y nuestras actividades de esparcimiento se desdibujó, impactando negativamente nuestros hábitos de autocuidado. Para aumentar la productividad, el sueño es fundamental.
Crea horarios para tus actividades y sé determinado en su cumplimiento. Recuerda que dormir más de 7 horas al día te proveerá la capacidad de rendir en tus actividades.
Activa el silencio en tu teléfono móvil
Los teléfonos son una tentación irresistible. Si debes concentrarte en una tarea específica, deshabilita las notificaciones de redes sociales y correo electrónico durante el tiempo estimado para cumplir con tus labores. Puedes programar breaks cortos para la revisión de tu celular cada 45 minutos, así te aseguras de invertir tu tiempo en tus prioridades y te ocupas de lo que debas resolver a través del móvil.
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