¿Cómo son las Startups o empresas emergentes?

Una startup es una empresa diseñada para crecer rápidamente, lo que comúnmente se conoce por el término de escalable.

No es necesario que una startup tenga que ser desarrollada en el ámbito tecnológico, o que deba estar financiada por fondos de capital riesgo. Son algunas características más de este tipo de negocio, pero lo más esencial es el rasgo del crecimiento.

Si consigues el crecimiento adecuado, todo lo demás funcionará a la perfección. Lo que significa que puedes utilizar el crecimiento como una brújula para tomar casi todas las decisiones a las que te tendrás que enfrentar.

Miles de empresas se constituyen cada año, pero sólo una pequeña parte de ellas son realmente startups. La mayoría son empresas dedicadas al sector servicios, como restaurantes o peluquerías, entre otros. En este sentido, una peluquería no está diseñada para crecer rápidamente, sino para ser una empresa sólida y permanente en el tiempo. Sin embargo, un motor de búsqueda, por ejemplo, sí debería estar diseñado para ser un negocio escalable.

Tipos de financiación para una Startup

1. Ronda preliminar: También conocida como “bootstrapping,” es aquella ronda en la que invierten en el negocio los fundadores y sus seres queridos.

2. Inversores iniciales: Luego viene la semilla de la financiación de los llamados “angel investors” o “business angels”, personas con un elevado patrimonio que invierten en empresas en sus estados iniciales.

3. A, B, C, y D: Posteriormente llegan las rondas de financiación en serie lideradas principalmente por empresas de capital riesgo que invierten de decenas a cientos de millones en empresas de nueva creación como son las startups.

4. Salida a bolsa: Las startups pueden decidir salir a bolsa y abrirse a fondos externos a través de una Oferta Pública de Venta (OPV) o IPO, en inglés, la adquisición por un objetivo de propósito especial o la cotización directa en una bolsa de valores.

La evolución de las Startups

Una startup nace con el objetivo de transformarse en una organización consolidada, ya sea como empresa o como profesional independiente. La startup como tal tiene fecha de caducidad y está viva hasta que se da con un producto/servicio que es comprado por clientes y ofrecido a través de unos canales y procesos definidos y repetibles, es decir un negocio consolidado.

Esta organización vive mientras se necesiten hacer experimentos que nos lleven a un mejor conocimiento de nuestro producto, clientes y modelo de negocio. Una vez todo esto esté bastante bien definido es momento de cambiar la estructura para definir un mapa de ruta que nos conduzca a unos resultados más predecibles.

Claves para que tu Startup tenga éxito

• Innovación: Las startups giran en torno a productos y servicios innovadores. Si sueles tener buenas reflexiones y estás atento a los servicios que pueden funcionar, tarde o temprano, te surgirán ideas increíbles.

• Realiza pruebas: Cada startup comienza a partir de una fase de prototipo, en la que el modelo de negocio se prueba dentro de tu público objetivo, pero en un muestreo reducido. Lanza esta versión básica (más conocida como Producto Viable Mínimo) y observa los resultados que obtienes, sin dejar de analizar la reacción del público sobre ella.

• Socios: Comenzar solo es siempre muy difícil. Las empresas necesitan diferentes competencias para salir adelante, entonces seguramente tendrás que recurrir a un socio, es decir, un futuro socio. Busca personas de confianza dentro de tu networking y que tengan capacidades complementarias a la tuya. Esto garantiza la eficiencia de tu startup cuando se lanza al mercado.

Si te interesa conocer más sobre esto, te recomendamos revisar El Diplomado en Dirección de Empresas que tenemos aquí en CEUPE, el cual está compuesto por las áreas fundamentales para la gestión empresarial y se enfatizara en el pensamiento estratégico, mediante el estudio de las funciones directivas, herramientas para la gestión de proyectos y la resolución de problemas.