Ya existen alternativas para producir energía más respetuosa con el medio ambiente, solo hay que aprovecharlas y empezar a buscar posibles medidas que, gracias a la tecnología, se vuelvan más rentables, como la electricidad que se puede producir a partir de energía marina.
Estamos hablando de la energía que podemos extraer del mar, recuerda que el 70% del planeta es agua, de la cual el 97% proviene de los mares y océanos. Por lo tanto, la mayoría de los países del mundo con líneas costeras han comenzado a utilizar el agua de mar para obtener energía.
Nuestros mares y océanos proporcionan una enorme fuente de energía renovable, pero no solo a lo largo de la costa atlántica, como ha declarado la Unión Europea. Se están desarrollando tecnologías de energía oceánica para aprovechar el potencial de las mareas de los océanos.
La energía marina, también conocida como energía oceánica, es toda esa energía renovable que aprovecha los movimientos de las olas del océano, las mareas, los niveles de salinidad y las diferencias de temperatura.
Se utiliza para alimentar hogares e instalaciones cercanas, porque sus movimientos crean una fuente de energía cinética almacenada que puede ser utilizada por humanos.
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El potencial de este tipo de energía renovable es directamente proporcional al de cualquier otro sistema energético, ya que son muchas las fuerzas que ejerce el océano a medida que las personas y las comunidades se acercan.
Uno de los métodos más utilizados para obtener este tipo de energía es atrapar agua durante la marea alta y luego soltarla a través de una turbina durante la marea baja. En pleamar, y en profundidades pasa lo contrario, por lo que se abren las válvulas que generan el movimiento de las turbinas hidráulicas, lo que, a su vez, genera energía. Durante este tiempo, si la marea está baja, el proceso se invierte y también se utiliza para acumular energía.
Usos de la energía marina
Generalmente, este proceso se usa para el suministro energía eléctrica, bien sea a hogares cercanos a la planta o a industrias. En este sentido, diversas han sido las plantas instaladas a escala mundial para la obtención de este recurso, entre las que se pueden mencionar:
- La Rance Francia: su producción al año equivale al consumo de 225.000 personas.
- Tida Power Plant: es una planta mareomotriz ubicada en Corea del Sur y genera alrededor de 254MW.
- Annapolis Tidal Station: ubicada en Canadá, esta planta mareomotriz produce entre 80-100MW al día.
- Jiangxia Tidal Power Station: tiene la capacidad de producir 3000 y 3200 kW, se encuentra ubicada en China.
Tipos de energía marina
Al ser una fuente amplia de energía, ésta se puede clasificar según su potencial. Tenemos los siguientes tipos de energía marina:
- Energía de las corrientes, obtenida por las fuertes corrientes de los mares y océanos.
- Energía osmótica, que se obtiene a partir de los gradientes de salinidad existentes.
- Energía oceánica, basada en la temperatura variable de las profundidades de los océanos.
- Energía mareomotriz, parecida a la energía hidroeléctrica, basada en las masas de agua en movimiento de los mares y océanos.
- Energía olamotriz, en la que se aprovecha el oleaje superficial que es visto por los humanos.
Ventajas de la energía marina
- Es renovable: el hecho de que los movimientos giratorios de la tierra y la fuerza gravitacional entre el sol y la luna existirán por miles de millones, hace que la energía marítima se ubique como una de las más renovables.
- Es energía limpia: se considera que esta energía es de las más limpias y que contribuye al medio ambiente, ya que su fuente es totalmente natural. No obstante, la implementación de la obtención de la energía se encuentra en pleno desarrollo, lo que ha limitado la realización de estudios avanzados relacionados con el impacto que esta explotación tendría en el ecosistema marino.
- Predecible: al conocer los ciclos de las altas y bajas mareas, es fácil predecir cuándo aprovechar la energía cinética de los mares. Asimismo, se pude tener en detalle las especificaciones del oleaje y características de las profundidades con las que se podría diseñar a la perfección el mecanismo y estructuras de obtención.
- Eficiencia a baja velocidad: por ser 1000 veces más densa que el aire, el agua, aún con mínimos movimientos, puede generar energía. Se habla de que aun cuando el agua manifiesta velocidades de 1m/s, puede obtenerse energía.
- Larga vida útil: las estructuras empleadas para el aprovechamiento de esta energía puede resultar duradera en cuanto a su funcionamiento. Ejemplo de ello es la planta mereomotriz de La Rance en Francia que funciona desde 1966.
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